No existe la despedida perfecta. Solo existe un momento fútil en el cual dos sujetos evitan mirarse a los ojos mientras esconden sus lágrimas del otro (o al menos uno cree eso). Las palabras no son tan necesarias, es así que decir Adiós o Hasta luego no es relevante, pues ella se va y lo que tuviste de ella no retornara jamás, al menos no como se fue, con razón Borges repetía que lo único que se pierde es lo que no se ha tenido, pues lo que se tuvo no se pierde simplemente cambia o cae en el olvido. Durante una despedida un deseo de suerte siempre es necesario aunque por dentro te cuesta pensar en eso y posiblemente el deseo de suerte es una proyección de uno mismo para la vida de uno mismo ya sin ella. La vida parece comenzar y acabar con despedidas, por eso será que siempre para seguir adelante debemos dejar algo o a alguien? Tal vez fue la experiencia pero estuve más tranquilo, tenía un cigarro,...